El otro día os contaba qué podía hacer una madre triste paraencontrarse mejor. Pero a veces ocurre que no somos nosotras sino una amiga, o un familiar la que está pasando por ese proceso y nos gustaría poder ayudarla sin meter la pata.
Por eso hoy os cuento qué podéis hacer (o decir) para ayudar
a una madre que se siente desbordada e incapaz de llevarlo todo a encontrarse
mejor, o por lo menos “un poco menos mal.”
No trates de animarla
Las frases tipo “¡anímate!” no funcionan. Es más, puede que
ayuden a que la madre se ponga peor. El estado de ánimo no es algo que se pueda
cambiar con fuerza de voluntad o por quererlo mucho. Si así fuera, nadie se
sentiría triste nunca ¿verdad?
Así que decirle a alguien que se anime es como pedirle que
sienta hambre porque tú lo dices. No es que no quiera, es que simplemente no
puede.
"Decirle a alguien que se anime es como pedirle que sienta hambre porque tú lo dices"
De hecho, estas frases pueden ser muy dañinas porque dan a
entender que la mujer debería estar feliz y que, si no lo está, es porque no
quiere. Y ya tiene un problema más que echarse a la espalda.
Escucha
Escuchar significa oír con atención. Y voy más allá: una
verdadera escucha significa oír con atención sin estar pensando en lo que se va
a decir a continuación.
Me explico.
Muchos pacientes me responden a la pregunta de si ha hablado
de su problema con un amigo que no pueden, porque sus amigos tienen sus propias
historias y cada vez que empiezan a hablar, les dicen: “pues yo sí que estoy
mal…”
Si alguien te está contando un problema y lo siguiente que
dices es “pues yo…” es que no has escuchado de verdad.
"Escuchar significa oír con atención, sin interrumpir y sin pensar en lo que vas a decir a continuación"
Escuchar también significa no interrumpir, a no ser que
necesites una aclaración. Es decir, alguien que está escuchando de verdad, no
interrumpe a cada frase para dar un consejo, hacer una gracia ni mucho menos
para cambiar de tema.
Cambiar de tema parece una barbaridad pero se da mucho más a
menudo de lo que creéis. Cuando alguien le está contando sus problemas a otro,
el que escucha puede sentirse abrumado por la angustia y para aliviarse él
mismo, cambia de tema. No es por ser maleducado, simplemente se encuentra
incómodo cuando está con gente que se encuentra mal y “huye” de la situación.
Empatiza
¿Y esto cómo se hace? ¿Cómo transmitir a la otra persona que
entendemos su situación sin juzgarla ni intentar encontrar una solución?
Tan fácil como decir algo parecido a esto: “Debe ser
horrible estar sin dormir”. Esta frase indica que la has escuchado (y sabes que
no duerme) y que te pones en su situación sin minimizar (“ya verás como se te
pasa, no será para tanto..”) ni juzgar (“eso es porque lo coges mucho/poco en
brazos, o porque…”).
Una de las peores cosas que puede escuchar alguien que tiene
un problema es que este no es para tanto y que además es culpa suya el tenerlo,
¿no os parece? Así que mucho ojo con quitarle hierro al asunto, eso no es
empatizar ni calmar.
Pregúntale qué puedes hacer
Os voy a contar un secreto: La mayoría de las veces la gente
no nos cuenta sus problemas para que los solucionemos. Seguramente ya saben cómo pueden hacer para sentirse mejor
así que ¿por qué buscar una solución nosotros cuando podemos preguntarles
directamente?
De todas formas, como decían en la Bola de Cristal: “sólo no
puedo, con amigos sí”. Así que si piensas que de verdad hay algo que tú puedas
hacer, pregúntale primero antes de hacerlo, no vaya a ser que metas la pata:
“¿quieres que te limpie la cocina/te coja al bebé mientras te duchas/venga otro
día a hacerte compañía?….”
Siempre, siempre, preguntad antes. Recordad que es la
persona que tiene el problema la que seguramente ya sabe qué puede hacer (o qué
puedes hacer tú) para estar mejor.
Utiliza el sentido del humor
Si eres de los que hacen reír hasta las piedras, enhorabuena,
porque tienes el don de la “curación.”
La risa relaja y si una persona es capaz de reírse de sus
problemas, ya tiene más de media batalla ganada.
Pero ojo, hay que hacerlo con tacto y con precaución, poco a
poco para poder retroceder si vemos que a la otra persona no le está haciendo
gracia lo que le cuentas.
Además, recordad que el sentido del humor no sirve de nada
sin todo lo anterior: sin haber escuchado ni empatizado antes, una gracia puede
sentar tan mal como el peor de los juicios.
Por eso digo que si no te manejas muy bien con el humor, no
te la juegues y ve muy despacio.
¿Qué os han parecido? ¿a vosotras os ayudaría si alguien
hiciera todo eso? ¿qué fue lo peor que os dijeron para intentar animaros?
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La mención a la Bola de Cristal me ha llegado... Aquí una fan. De nuevo, la falta de empatía ante las preocupaciones de los demás. Me ha encantado.
ResponderEliminarjajaja, gracias. A veces no es tanto falta de empatía como la necesidad de resolverle el problema al que lo tiene. Pasa mucho. Nos angustia tanto ver a alguien pasarlo mal que necesitamos hacer algo…cuando a veces lo mejor que podemos hacer es no hacer nada
Eliminar¡Yujuuuu! El humor es lo mío. Vamos, que no me dejan ir a entierros porque no soy capaz de contenerme ni en esas situaciones. Oye, de verdad yo soy muy bruta pero lo de desdramatizar los problemas creo que es realmente práctico, te hace pensar que no tiene que ser para tanto, que hay cosas más importantes que realmente no tienen solución y además puedes pasar un buen rato ¡Todo son ventajas! Eso sí, yo empatizo mucho, pero también hay gente que se busca cada drama sin sentido que no puedo comprender.
ResponderEliminarSí, eso es cierto hay gente muy dramática por la vida. Pero yo hablo de esas otras que más bien se callan lo que les pasa por miedo a aburrir o a no ser comprendidas. Utiliza con sabiduría ese sentido del humor, es un don que pocos tienen :)
EliminarCuánta razón con eso de que no escuchamos. Vivimos en el mundo del yo. Nuestros problemas siempre nos parecen más que los de los demás.
ResponderEliminarSon las carreras por ver quién está peor. Pásate un día por un centro de salud y las verás en todo su esplendor
EliminarMuy buenas recomendaciones, como siempre. Yo que estoy pasando por un proceso de tristeza y soledad agradecería que alguien me escuchase sin juzgar. Y me encanta reírme!
ResponderEliminarBesos
Gracias Yolanda. Lo que estás pidiendo es un psicólogo, si ves que estás triste y no puedes salir de ahí, lo mejor es que pidas ayuda especializada
EliminarMe ha gustado mucho. En realidad así es cómo deberíamos animar a cualquier persona triste.
ResponderEliminarClaro, porque aunque parezca que no, las madres también somos personas ;)
Eliminar¡Me ha encantado! (Y lo de la Bola de Cristal... jajajaja, la guinda) :)
ResponderEliminar¡Gracias!
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