
En este curso intensivo de maternidad hay una asignatura que se va abriendo paso poco a poco, una guía para la vida. Por ahora M me ha enseñado cinco lecciones. He tomado buena nota y ahora os paso los apuntes.
Lección 1: La higiene
"Un niño sucio es un niño feliz", dicen ¿Y un adulto? Pues también. Embadurnarse de vez en cuando de yogur o sentarte en un suelo mojado mola tengas la edad que tengas.
Estamos muy acostumbrados a tener siempre las manos y la cara limpias y en cuanto nos las manchamos un poco, salimos corriendo a limpiarlas ¿a qué viene tanta prisa? Sigue con la tarea y ya te limpiarás después.
Lección 2: Buenos modales
Acuérdate siempre de saludar cuando entras en un establecimiento o en una casa particular. Saluda con entusiasmo y alegría. Sonríe a las personas que saludas y, si no te devuelven el saludo, no te enfades, sonríe siempre.
Para despedirse, lo mismo: una amplia sonrisa y un gesto con la mano es todo lo que necesitas.
Lección 3: Manejo de la frustración
Cuando intentas algo y no te sale aparece la frustración. Es inevitable. Demuéstralo enfadándote, saca la rabia, pero que no te dure mucho. Pasa a otra cosa y vuelve en otro momento. Ya verás como esta vez sí puedes hacerlo mejor.
Material para ejercitar la tolerancia a la frustración: Utilizar con precaución |
Lección 4: Proyectos de futuro
Lucha por lo que quieres e intenta conseguirlo con todas tus fuerzas. Pide ayuda si es necesario, que no te dé vergüenza decir que no puedes o que no sabes hacerlo solo. Comparte la alegría si consigues lo que quieres con quien te ha ayudado.
Lección 5: La autoestima
Date un aplauso cuando hagas algo bien, no disimules lo orgulloso que te sientes de ti mismo, eso no es bueno para nadie. Alégrate por tus logros tanto o más de lo que te alegran los logros de los demás. Presume de lo que has conseguido, no te avergüences de parecer presuntuoso, comparte con el mundo lo que has sido capaz de hacer y, si puedes, repítelo para que todos puedan verlo.
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Buenas enseñanzas. La verdad es que se aprende mucho cuando se tiene un cachorrillo. A mí me ha cambiado la perspectiva de muchas cosas.
ResponderEliminarEn algunas cosas, el cambio de perspectiva ha sido de 180º! En otras simplemente nos hacen recordatorios de lo que es importante
EliminarEn lo de la forma de expresar la frustración y el genio, y la mala leche, creo que mi bichilla ha copiado más de mí que yo de ella. ¡Es tremenda!
ResponderEliminarSi es que en esta vida todo se pega menos la hermosura XD
EliminarLos del autoaplauso me encanta, por aquí lo practicamos mucho y es una alegría para todos. A mi me encanta esta fase, me encanta ver como empieza a hacer acto de presencia la inteligencia, es alucinante como empiezan a entender y razonar de la noche a la mañana y como de pronto te das cuenta de que ya puedes comunicarte aunque sea mínimamente con ellos. Pero de vez en cuando me entra morriña por ese bebé que ya no volverá, que también era una monada (pero bueno, eso se arregla teniendo otro, no? ;-) )
ResponderEliminarYo lo que más hecho de menos son las siestas que se pegaba el tío encima de mi y yo tumbada en el sofá viendo la tele. Y de tener otro, hasta que este no duerma la noche entera, yo paso!
EliminarMuy bueno, dar palmas y gritar un bieeeeen sienta genial, yo lo hago a veces en el trabajo jajaja los que tienen niños me entienden y los que no piensan que estoy zumbadita... Jajaja
ResponderEliminarSí, es una maravilla. Yo lo estoy empezando a hacer cada vez que termino un post, o que alguien me deja un comentario bonito :)
EliminarAyyy, cuánto tenemos que aprender de nuestros pequeños!! Muchas gracias por compartir con nosotros estas lecciones!! Un abrazo
ResponderEliminarGracias a ti por comentar ;)
EliminarHaha! Me encanta todo lo que has aprendido! El manejo de la frustración sobre todo, nosotros tenemos ese faro en casa de los abuelos y me he quedado impresionada de como ha pasado de ignorarlo a intentarlo alguna vez, ver que no podía hacerlo y rápido dejarlo, y de un día para otro hacerlo sin más y se acabó el asunto. ¡Chapeaux! ¿pq nos volveremos tan rallados de mayores?
ResponderEliminarSí, la verdad es que es la lección que más me ha costado aprender pero también es la más útil
EliminarQue cierto todo! Festejamos pequeños logros de los más pequeños, y los nuestros ni siquiera los saboreamos. Gracias por conseguir que saque una sonrisa recordando mientras leía este post!un abrazo!
ResponderEliminarGracias a ti por haberlo leído. Un abrazo
EliminarMe ha encantado esta entrada, la he compartido en fb y ya la ha compartido otra persona 😊 Todos deberíamos aprender esas lecciones de los mas pequeños!
ResponderEliminarMuchas gracias por compartirla, así me ayudas a continuar con el blog. Un abrazo!
EliminarOye, se me acaba de ocurrir que me ha gustado tanto esta entrada que, si me lo permites, me gustaría traducirla al polaco y publicarla en mi blog (es bilingüe). POR SUPUESTO, tú aparecerías como la autora, yo como la traductora (soy traductora, de modo que me viene bien de vez en cuando traducir algo, ya que no estoy trabajando ahora mismo) y en el post pondría un enlace a la entrada original (es decir, a esta misma página). ¿Qué te parece?
EliminarClaro, Paula, puedes traducir lo que quieras :)
EliminarSe me olvidó pasarte el link por si querías ver lo raro que se veía en polaco ;) Por cierto, como me has dicho que traduzca lo que quiera voy a traducir también el de los niños que muerden, que tengo amigas polacas con ese problema y creo que les puede interesar :)
EliminarAh, y te dejo el link que ya se me olvidaba otra vez:
http://frikadasdepaula.blogspot.de/2015/11/5-rzecze-ktore-sie-nauczyam-od-swojego.html
¡Muchas gracias!
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