Atención: Esto NO es un post de manualidades.
Cuando M. estaba todavía de huésped dentro de mí, J. y yo nos mudamos por
tercera vez en dos años. Esta vez fue una mudanza sin coches, del tercero
pasamos al primero. Vamos, que íbamos bajando cajas en pijama. Aun así,
conseguimos perder un par de cosas. Que venga Iker Jiménez y me lo explique.
Por aquel entonces ahora tan, tan lejano, recuerdo que teníamos muy claro
que los juguetes iban a estar todos en la habitación de juegos (anteriormente
conocida como habitación trastero). También teníamos claro que M. iba a tener
pocos juguetes pero todos de diseño y buena calidad.
Ingenuos.
Sin haber cumplido el año de vida,
M. tiene más juguetes que pelos en la cabeza. De hecho, muchos están sin
abrir a la espera de un momento de desesperación parental de que sean
adecuados a su edad.
Ahora bien, M. no es tonto y sabe distinguir lo que es algo interesante
para el mundo de lo que no lo es. Así, los juguetes de plástico con colores, sonido
infernal música, luces y movimiento consiguen captar su atención el tiempo
justo que tarda su santa madre en ir a hacer un pis.
Lo que a M. verdaderamente le interesa son los objetos básicos para la
supervivencia de nuestra especie en pleno siglo XXI. Cuando se pone a su
alcance algo así, ya puede venir el señor Fisher-Price en persona que no habrá
quien lo despiste de su objetivo.
Aquí os dejo la lista de los objetos que se han acabado convirtiendo en los
mejores juguetes de la casa, con puntuación de su poder hipnotizador incluido.
LLAVES. Las de verdad. El rico metal tiene algo que no se
puede explicar. Es amor a primera vista. Poder hipnotizador: 10
PINZAS PARA LA ROPA. Sacarlas una a una, todo un
arte. Poder hipnotizador: 6
MÓVIL VIEJO. Sin batería para evitar
disgustos. Poder hipnotizador: 4 (Uno nuevo encendido tiene un poder
hipnotizador de 500 pero M. no ha superado la fase oral así que por el momento
no existe para él).
BOTELLA DE AGUA CON AGUA. Sonajero bueno,
bonito y barato. Si le echas imaginación, hasta puedes sentir que estás en la
playa. Poder hipnotizador: 7
CEPILLO PARA EL PELO. No podrás resistirte a
cepillarte la lengua. Poder hipnotizador: 9
CEPILLO DE DIENTES. Parecido al anterior,
pero de menor tamaño. Poder hipnotizador: 9
CUCHARAS. Si juntas dos, concierto asegurado.
Poder hipnotizador: 8
MANDO A DISTANCIA. Porque hubo un tiempo en el que
quien tuviera el mando tenía el poder. Algo debe quedar de eso. Poder
hipnotizador: 5
ZAPATILLAS DE MAMÁ/PAPÁ. Combina la suavidad del
tejido con la suciedad de la suela. Poder hipnotizador: 6
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